
Los cinco veces campeones del WRC, Sébastien Loeb y Daniel Elena, se enfrentarán esta semana en un duelo del todo inhabitual. Cada uno al volante de un Citroën, correrán el 54 Rallye du Var, de Sainte-Maxime, última prueba puntuable para el Campeonato de Francia de Rallies de asfalto.
Nada de duelos al scratch, tan sólo se trata de una participación completamente festiva de fin de temporada en la que Loeb y Elena, ganadores de esta prueba en 2000 al volante de un Citroën Xsara Kit Car, correrán como un fin de fiesta muy especial. Loeb, acompañado de su mujer Séverine, conducirá un C2 Súper 1600, mientras que Elena, a quien hará las funciones de copiloto Olivier Campana, pilotará un C2 R2 Max. Para el copiloto monegasco esta será su segunda participación de 2008 como conductor, tras haberse colocado detrás del volante en el Rallye Vins Mâcon. Esta prueba del nacional francés se celebrará este próximo fin de semana, entre los días 28 al 30 de noviembre.
Comenta Sébastien Loeb: “A Séverine le encanta montar a mi lado en un coche de rally y, para mi, ésta será una buena oportunidad de encontrarme con el público francés. El próximo año eso no será posible ya que ni Monte-carlo, ni Córcega, ni Alemania están en el calendario del WRC”.
Tras esta carrera, el equipo se volverá a reunir en el habitáculo del C4 para efectuar los reconocimientos previos al Wales Rally GB, prueba en la que tienen toda la intención de imponerse y así conseguir vencer en una de las pocas pruebas del WRC que faltan en su palmarés.
El piloto galo también ensayará, justo el día antes del Rallye du Var (27 de noviembre), un Peugeot 908, vehículo que viene a sumarse a la gran variedad de automóviles que últimamente están pasando por las manos del número uno de rallies del mundo. Loeb y Stéphane Sarrazin intercambiarán por un día sus vehículos habituales, será en el circuito Paul Ricard donde “Seb” conducirá el 908 HDI FAP y Sarrazin el C4 WRC.
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